Las patatas son las grandes olvidadas en este blog. Hasta hoy! Que entran por la puerta grande con este plato que me recuerda a mi infancia y del que siempre me encanto el nombre, y que solo por llevarlo hace que este tubérculo se vista de fiesta cuando se encamisa en su rebozado y se baña en una ligera salsa verde. Según wikipedia es un plato popular y económico oriundo de Palencia pero dado a conocer en la Villa y Corte en el S XIX. En poca de posguerra debi ser muy habitual comerlo y su fama llegó hasta los 70, en mis tiempos de colegio, pero después cayó en el olvido. Por eso, hace unos días me alegró verlo en el libro de Mari Lalo Grosso de Mc Pherson y me encantó prepararlo y comerlo de nuevo. Volvamos a ponerlo de moda que en estos días de otoño que ya parecen invernales en los que apetece un buen guiso caliente como entrante!!
INGREDIENTES (6 personas)
- 1 Kg de patatas
- 1 cebolla mediana
- Medio vaso de vino fino de Jerez (u otro vino blanco si no tuvieras ese)
- Una cucharada de harina
- Un ramito de perejil y dos dientes de ajo machacados en mortero
- 4 hebras de azafrán
- Aceite de oliva VE de DEM (para freir las patatas y para la salsa)
- 2 huevos batidos (para rebozar las patatas)
- 2 huevos duros picados para decorar
- Harina (para rebozar las patatas)
- Sal
- Caldo de pollo (o agua, que ya el azafrán y el perejil dan gracia al plato)
PREPARACIÓN
- Cortar las patatas en rodajas de aproximadamente un cm y meterlas en agua con sal durante media hora. Pasado ese tiempo secarlas y rebozarlas en harina y huevo. Freírlas en aceite de oliva VE (es el más estable a alta temperatura) y reservarlas.
- Para hacer la salsa, utilizar una cacerola en la que quepan bien las patatas. Rehogar la cebolla picada en un poquito de aceite de oliva VE, hasta que esté pochadita. A continuación añadir una cucharada de harina y darle vueltas en la sartén hasta que burbujee con el fin de tostarla y que no sepa a crudo.
- Agregar el vino fino y dejarlo hervir un poco, para que libere el alcohol. A continuación añadir un poco de caldo para desler bien la harina y aligerar la salsa y después el ajo y perejil bien machacado y las hebras de azafrán.
- Colocar las patatas rebozadas en la cacerola en capas y cubrir con más caldo, hasta cubrirlas bien. reservar algo de caldo caliente al lado del fuego por su hubiera que añadir más.
- Salar ligeramente el guiso y dejarlo cocer a fuego lento, hasta que se hagan las patatas. Cada uno sabrá si es conveniente añadir más caldo en el transcurso de la cocción. Las patatas absorben mucha agua, y es aconsejable que se sirvan jugosas con liquido suficiente.
- Antes de servir espolvorear el plato con huevo picado por encima y decorarlo con una ramita de perejil.