Esta forma de preparar las zanahorias, con ese toque dulce que le proporciona el azúcar moreno y la cremosidad de la mantequilla, hace que obtengamos una guarnición de un delicado sabor que combina de maravilla con cualquier carne asada.
- Se cuece la zanahoria en 250 ml de agua, con el azúcar, la mantequilla y la pimienta, hasta que esté tierna, pero no demasiado pasada.
- Se cuela el jugo de cocción de las zanahorias
- En una sartén, se hace un "roux" con la mantequilla y la harina, es decir, se derrite la mantequilla y se añade la harina, dandole unas vueltas en la mantequilla hasta que hagan unas pequeñas burbujas. En ese momento se va añadiendo poco a poco el jugo de cocción hasta que se alcance la cremosidad deseada.
- Se le da un toque con un chorreón de crema de avena, y se sazona al gusto.
- Se añade esta salsa sobre las zanahorias y se espolvorea con el perejil picadito justo antes de servir.
OTRA VERSIÓN de este plato puedes prepararla:
- con miel en vez de azúcar moreno,
- cortar las zanahorias en bastoncillos,
- y espolvorearla con cebollino