Otra receta más para el kale, esa hortaliza de hoja recién llegada a nuestra cesta y que tenemos que mimar especialmente por eso de ser nueva... Todavía estamos a tiempo de tomar una sopita, que aunque este invierno está siendo suave pueden todavía llegar días fríos.
INGREDIENTES (4 personas)
- 1 cucharada de aceite de oliva VE de DEM
- 2 chalotas
- 1 tallo de apio
- 2 ramitas de romero
- 1 hoja de laurel
- 1 pizca de cayena en copos
- 1 diente de ajo
- 2 puñados de garbanzos (puestos en agua la noche anterior y cocidos con laurel, cebolla y un diente de ajo)
- 6 hojas de kale quitado el nervio central y cortado finamente
- 800 ml de caldo de pollo
- El jugo de medio limón
- Unas rodajas de limón muy finas para decorar
- Pan de pueblo tostado
- Parmesano rallado
PREPARACIÓN
- Picar las chalotas y el apio en daditos (quitando los hilos al apio previamente).
- Rehogar las chalotas en el aceite y cuando lleven un minuto añadir el apio y seguir rehogando todo conjuntamente durante otro minuto.
- Quitar las hojas a las ramas de romero, y picarlas finamente y añadirlas a lo anterior con la hoja de laurel y la cayena.
- Agregar igualmente el ajo habiéndolo pelado previamente aplastando con una hoja de cuchillo ancha.
- Añadir los garbanzos y el kale y cocer el conjunto en el caldo durante 20 minutos .
- Añadir el jugo de limón, la sal y la pimienta (probar si es suficiente zumo, porque dependerá del caldo que se haya usado)
- Usar la minipimer para triturar la sopa, metiendo el brazo en la olla, y hacerlo en varios golpes con el fin de no dejarla demasiado fina, dejando algunos garbanzos semienteros.
- Antes de servir colocar una rodaja fina de limón encima y un trozo de pan tostado con parmesano espolvoreado por encima.