Se podra decir que el rösti es para los suyos como la tortilla de patatas para nosotros. En su origen se tomaba en el desayuno, pero actualmente se suele servir acompañando platos de carne. Aquí lo proponemos como base de un huevo pochado, por no añadir calorías al plato, pero se podra cubrir igualmente con un huevo frito, o también con algo tan distinto como salmón ahumado, como aparece en la foto al final de la receta.
PREPARACIÓN
- Cortar las patatas con la mandolina en "spaguetti" fino y remojarlas en agua.
- Poner las patatas cortadas en un trapo de cocina fino y escurrir el agua de ellas todo lo que se pueda. Una vez escurridas secarlas más con papel de cocina.
- Calentar dos cucharada de aceite en una sartén antiadherente y poner en ella cuatro aros de acero inoxidable que nos servirán para dar forma a las tortitas de patata
- Colocar la patata en una capa de1 cm dentro de cada uno de los aros. Dorar las tortillas a fuego medio durante unos minutos y a continuación bajar un poco el fuego y tapar la sartén para que se cuezan bien las patatas. Una vez doradas por un lado, retirar el aro, dar la vuelta a cada rösti y dorar por el otro lado. Reservar.
- HUEVOS POCHADOS: Poner a hervir agua en un cazo pequeño. Cuando rompa a hervir añadir un buen chorreón de vinagre blanco. Romper el huevo dentro del agua avinagrada, donde se irá cuajando poco a poco. Pasados 3 minutos retirar con una espumadera y ponerlo en un papel de cocina para escurrir. Cortarle las "barbas" con mucho cuidado.
- Para montar el plato colocar un huevo encima de cada rösti , sazonar y servir
- Si se quiere se puede decorar este plato, poniendo bacon en cuadraditos rehogado, sobrasada, o chorizo frito encima del huevo; e incluso se puede hacer con huevo frito en vez de escalfado.
VARIACIóN: El rösti se puede servir como base de un salmón marinado o ahumado, servido con los aderezos típicos como son las alcaparras, cebolla y huevo picado, o incluso como aparece en esta foto con una salsa de nata espesa mezclada con salsa horseradish.