Aquí propongo una manera distinta de comer el calabacín. Rallado y rehogado se presta muy bien a untarse sobre una tostada y de ahí recibe su nombre de mantequilla. Pero no os llaméis a engaño por el nombre. Se trata de algo muy saludable, porque aunque se puede elaborar con mantequilla, yo lo he hecho con aceite de oliva VE. El compañero de foto es nuestro queso de cabra en rulo Collado de Gredos, aderezado con cebollino picado. Que cada uno decida como prefiere su tapa, con ambos mezclados o por separado...
INGREDIENTES (4 Personas)
- 1Kg de calabacín
- 2 chalotas o ajos o una combinación de los dos
- 100 ml de aceite de oliva VE de DEM
- Sal y pimienta
PREPARACIÓN
- Lavar bien los calabacines y rallarlos con un rallador por su calibre intermedio de forma que queden bastoncitos cortos regulares
- Envolver el calabacín en un trapo de cocina y apretar bien para que que suelte algo de su agua.
- Cortar finamente las chalotas o los ajos, o una mezcla de ambos, y rehogarlo en aceite de oliva en una sartén.
- Añadir el calabacín a la sartén y rehogar durante aproximadamente 15 minutos, a fuego más vivo al principio, bajándolo un poco pasados unos minutos hasta que se vea que tiene una consistencia untuosa.
- Sazonar a gusto con sal y pimienta, y dejar enfriar.
- Ya está preparada esta mantequilla para untar sobre pan tostado, como un original crostini de aperitivo o como guarnición de carnes o pescados.