A menudo nos sobra redondo o carne asada y nos aburre seguir comindolo de la misma manera, acompañado de su salsa (que por otro lado, a veces se nos ha acabado)
Esta forma de preparar la carne me recuerda a los huevos al colchón que tomábamos en mi casa de niños y de ahí he robado el nombre..
PREPARACIÓN
- Se corta la pieza de redondo en rodajas de 1 cm.
- Se doran la carne en una sartén sazonándola ligeramente con un poco de pimentón o con las hierbas que se desee para darle más gracia.
- Se hace una bechamel espesa y se deja enfriar un poco
- Se embadurna una placa de mármol u otra superficie muy lisa con un poco de aceite de oliva VE, se extiende una capa de bechamel y sobre ella se colocan las rodajas de carne. Se pone bechamel encima de cada una con una cuchara.
- Se deja enfriar bien y con un cuchillo se individualiza cada unidad cortando alrededor y para terminar se le da buena forma con la mano.
- Se rebozan la rodajas cubiertas de bechamel en huevo y pan rallado
- Se fríen en aceite de oliva hasta que adquieran un bonito color dorado
- Servirla con salsa de tomate casera.