¿Por qué es tan valorado el solomillo de añojo ecológico?
La carne ecológica destaca por ser producida sin pesticidas ni fertilizantes químicos. Proviene de animales criados en condiciones respetuosas con su bienestar, con acceso a pastos naturales. Además, al limitar el uso de antibióticos y hormonas, garantiza una opción más saludable y sostenible, con un mayor enfoque en la calidad de cada pieza y en el cuidado del medio ambiente.
Nuestros animales, se crían en nuestra granja, donde los terneros no se destetan antes de los seis meses. Para contribuir a su crecimiento sano y natural, durante trece o catorce meses, viven en libertad, en un cebadero parcelado donde se alimentan de pastos, forrajes y pienso elaborado en la propia finca. Este tipo de prácticas sostenibles y su alimentación natural, se reflejan en que la carne resulta jugosa y especialmente tierna.
El solomillo de añojo es altamente apreciado por su terneza y sabor delicado. Proviene de la parte lumbar del animal, específicamente de la región dorsal, donde los músculos son menos trabajados, lo que contribuye a su terneza. Este corte se caracteriza por su textura suave y jugosa, con un bajo contenido de grasa intramuscular, lo que lo hace especialmente tierno y apto para una amplia variedad de preparaciones culinarias.